viernes, 18 de mayo de 2012

Microcréditos, esos grandes desconocidos (y desconfiados)



Hablemos de Microcréditos. ¿Qué son? ¿Para qué puñetas pueden servir? ¿Son útiles? ¿Se pueden encontrar en este país?
Cuando nos referimos a ellos instintivamente la memoria colectiva viaja hasta los países subdesarrollados. Allí se pone en práctica gracias a las ONG's (los bancos ni se acercan porque no hay ninguna garantía de devolución) Básicamente son créditos de cantidades ínfimas destinados a desarrollar algún tipo de negocio o instalación comunitaria (escuelas, centros de apoyo, incluso hospitales, etc...) El importe es pequeño a nuestros ojos porque en estos países la moneda está muy devaluada respecto a la nuestra, es decir que 5 Euros allí podría ser un salario mensual.

En nuestro país hay demasiada gente en el paro que tiene miles de ideas de negocio (y que realmente tienen lo que hay que tener para ser emprendedor y empresario autónomo) pero que por desgracia no tienen acceso a ningún tipo de oportunidad de llevarlo a término (ni al inicio) por falta de financiación. Últimamente parece que a las familias pobres o de clase media nos excluyen del "escenario empresarial" por no tener avales que nos cubran en caso de las temidas pérdidas.

¿Qué pasa si queremos traer este tipo de financiación a España? Todo son problemas.
No hay actualmente ningún Instituto Oficial de Microcréditos para los ciudadanos españoles. Todo está centralizado en los bancos. Si quieres montar un negocio la única opción (superpublicitada) son los créditos ICO que te reserva el Gobierno pasando por entidades financieras. Financiación similar a los Microcréditos (antes de la crisis) a veces te la otorgaban algunas cajas de ahorros con la condición de que fueran para una obra social reconocida. Ahora no dan ni las gracias si no hay un altísimo beneficio para ellos.
Además de la desconfianza genética que tenemos todos en el imaginario popular. Eso de que haya un grupo de expertos que te prestan dinero y encima te ayudan a llevar tu proyecto hasta buen puerto y que quieren antes el bienestar del emprendedor y el fin social a la devolución del microcrédito parece una utopía propio del comunismo de otras épocas y países. "¡Es que nos quieren timar!" "Debe haber gato encerrado"... Todas estas frases están en nuestra boca cuando alguien nos comenta este tema. No hay trampa ni cartón, niños y niñas, otras opciones para el bien común son posibles, solo hay que investigar un poco y echarle huevos.

Business Angels

¿Y esto qué es? Básicamente son plataformas de ayuda a nuevos proyectos. Sobretodo se pueden encontrar por Internet. La explicación básica sería así: tú tienes una idea de negocio, haces un plan de empresa preciosísimo (que es la explicación ampliada y detallada de tu proyecto y de cómo afrontar el futuro), lo cuelgas en Internet en cualquiera de las variadas plataformas de apoyo que hay y la gente con recursos que estén interesados van poniendo dinero hasta conseguir la cantidad necesaria para que salga adelante. Es como un mecenazgo ya empleado desde tiempos inmemoriables en arte o en música.
Aquí no se persigue tanto el bien común anónimo, aunque algo de fondo hay, sino que se persigue más el fin lucrativo de la persona que ha invertido en el nuevo negocio (puede ser como partner (con lo que ambos sacan rendimiento al 50%), en forma de acciones o participaciones o en algún tipo de beneficio sobre el beneficio (como si fueran intereses)) Siempre es con el total consentimiento del futuro emprendedor y saldrá a la larga más barato y más beneficioso para la viabilidad del negocio que un crédito bancario. Ten en cuenta que al inversor le sales más a cuenta con la empresa en marcha y sacando beneficios que de cualquier otra forma por lo que se empleará más a fondo en ayudar para conseguir salir de cualquier bache que se encuentre por el camino. Es otra opción más.


En tiempos de crisis, y de demostración de que el sistema no siempre funciona como debiera para todos, nos conduce a intentar probar y confiar en otras vías para poder desarrollar riqueza y volver a producir y ser competitivos. Se trata de generar trabajo como sea, pero trabajo de calidad. Nadie habla de hacerse rico, simplemente de conseguir el bien común mediante la generación de nuevos negocios viables. La persona consigue un autoempleo, paga sus impuestos (de lo que el Gobierno se lucra) y deja de cobrar una prestación que estamos pagando entre todos. Salimos ganando más que perdiendo.
Si mi vecino consigue un microcrédito o le financia un Business Angel, gracias a eso monta una empresa y gracias a eso 4 personas tienen trabajo (incluso yo mismo) esto es un bien común. Niños y niñas, yo prefiero esto a ser devaluados como mano de obra barata o a convertirnos en ricos Patricios Romanos viviendo del BOE o ciudadanos de segunda dependientes del ingreso del paro los días 10 de cada mes como si de droga se tratara.
Entonces, ¿cuál es el problema?

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